TIEMPO INDELEBLE
No tengas miedo a la
noche,
el día se hace fuerte
al alba
cuando la luz evapora
los sueños.
Transitamos por
caminos diferentes.
Pasajeros en mundos paralelos
donde la esperanza, del
recuerdo se apeó.
A veces, al salir del
Metro,
me parece vislumbrarte
entre la multitud:
diva misteriosa y eterna del desasosiego.
UN NAVEGANTE A LA DERIVA
Cada vez me cuesta más encajar en este espacio.
En el mundo que habito, el dolor se ha atrincherado
y las decepciones crecen salvajes en mi jardín:
barbecho de dolor sus frutos.
Despierto cada mañana a la hora de la Utopía,
resplandor de luz que doblega a las tinieblas,
y sólo te necesito a ti para salir adelante.
Aunque no nos conozcamos, respiramos el mismo oxigeno
que me hace sentirte cerca compartiendo la primavera.
Llegará el día en el que despojados de lo vano,
encontremos nuevo rumbo en la deriva.
Comentarios
Publicar un comentario